Bitcoin cae ante tensiones geopolíticas: Trump reaviva el miedo

 Bitcoin cae ante tensiones geopolíticas: Trump reaviva el miedo
  • Bitcoin se desliza un 3,3 %, Ethereum un 4,5 % y Solana cerca de 5 %, en medio de amenazas bélicas entre EE. UU. e Irán.
  • Aumenta la percepción de riesgo global mientras el dominio de Bitcoin se mantiene firme frente a la incertidumbre.

BTC vuelve a los 103.000 dólares en una jornada marcada por la geopolítica

El mercado cripto registra un retroceso tras declaraciones incendiarias de Donald Trump sobre el líder supremo iraní. La jornada del lunes estuvo marcada por una fuerte corrección en el mercado cripto, desencadenada por el aumento de las tensiones entre Estados Unidos e Irán. Bitcoin cayó más de un 3,3 % en 24 horas, cotizando momentáneamente en 103.388 dólares, su punto más bajo desde el 6 de junio.

Fuente: Tradingview

La reacción vino tras una publicación del expresidente Donald Trump en redes sociales, en la que sugirió que Estados Unidos conoce la ubicación del ayatolá Ali Khamenei y que podría eliminarlo: “Es un blanco fácil… pero no lo haremos, al menos por ahora”, escribió, exigiendo además la “rendición incondicional” de Irán. Las declaraciones escalaron aún más una situación ya tensa desde que Irán e Israel retomaron los intercambios de misiles el jueves pasado.

Este contexto generó una ola de aversión al riesgo, no solo en criptomonedas, sino también en los mercados tradicionales. El Nasdaq y el S&P 500 cerraron ambos con caídas cercanas al 0,7 %, reflejo de la cautela de los inversores ante el deterioro del panorama geopolítico.

Ethereum y altcoins acusan el golpe

Ethereum no fue ajeno al movimiento y retrocedió un 4,5 %, cotizando cerca de los 2.533 dólares, mientras que Solana, Cardano y Dogecoin se dejaron entre un 4,8 y 5,2 %. Estas caídas no solo reflejan la sensibilidad del sector ante eventos externos, sino también la fragilidad de muchos activos cripto ante shocks globales.

Suscríbete y recibe las mejores actualizaciones e informes en tu bandeja de entrada

No obstante, el índice de dominio de Bitcoin se mantiene elevado, lo cual podría interpretarse como una señal de que los inversores siguen viéndolo como un activo de referencia, incluso en tiempos turbulentos.

Conflicto creciente en Irán y riesgo de descontrol

Por su parte, reportes de Reuters indican que el líder supremo iraní enfrenta un entorno cada vez más precario: varios de sus asesores militares han sido eliminados por ataques israelíes, y la posibilidad de errores estratégicos ha aumentado significativamente. “Es un entorno extremadamente peligroso para la estabilidad de Irán”, advierte una fuente con acceso directo al círculo del ayatolá.

En este contexto, la figura del hijo de Khamenei gana peso como eventual sucesor, aunque su posición es aún débil frente a las dinámicas internas del régimen. Las tensiones no solo amenazan con una escalada militar directa, sino también con una desestabilización regional de consecuencias imprevisibles para los mercados globales.

Bitcoin como termómetro de la incertidumbre

En una nota enviada a Decrypt, Mike Cahill, CEO de Douro Labs, describió el panorama como una “volatilidad típica derivada de tensiones geopolíticas”, y destacó que Bitcoin mantiene su atractivo como refugio alternativo. Aunque esta narrativa ha sido cuestionada por algunos analistas tradicionales, lo cierto es que cada nuevo episodio de crisis reafirma el posicionamiento de BTC como activo anticensura y sin exposición directa a decisiones políticas centralizadas.

Por su parte, Strahinja Savic, director de análisis de FRNT Financial, considera que la caída actual refleja más una acción táctica de operadores de corto plazo que una pérdida de confianza estructural en Bitcoin. “Es la típica salida de dinero buscando liquidez mientras se calma el entorno”, explicó.

La reacción del mercado cripto ante los eventos en Medio Oriente confirma su creciente sensibilidad a las dinámicas geopolíticas. A diferencia de ciclos anteriores, Bitcoin ya no es un activo de nicho; está integrado a la narrativa financiera global. Su rol como refugio de valor sigue en construcción, pero cada nueva crisis lo pone a prueba ante un público más amplio. La clave para los inversores será discernir entre movimientos especulativos de corto plazo y fundamentos estructurales de largo plazo. Y hoy más que nunca, lo estructural se ve cada vez más resiliente.