2 de mayo de 2025

USD1 irrumpe en el top 10 de stablecoins y catapulta el crecimiento de BNB Chain: ¿cambio de poder en las L1?

 USD1 irrumpe en el top 10 de stablecoins y catapulta el crecimiento de BNB Chain: ¿cambio de poder en las L1?

BSC creció un 30% en capitalización de stablecoins esta semana, impulsado por el lanzamiento de USD1, que ya supera los $2.1B.
USD1, emitido por World Liberty Financial y vinculado a Donald Trump, se posiciona como un token institucional respaldado por T-Bills y custodiado por BitGo.

Una nueva narrativa está comenzando a tomar forma en el competitivo mercado de stablecoins. El debut de USD1, una stablecoin promovida por World Liberty Financial y vinculada al presidente Donald Trump, ha generado un efecto dominó en el ecosistema cripto. En apenas una semana, su lanzamiento ha impulsado la capitalización total de stablecoins en la BNB Chain (BSC) en más de $2.100 millones, provocando un incremento del 30,36% y acercándola peligrosamente a Solana, que mantiene una participación del 5,43% frente al 3,85% de BSC.

Según los datos, el mercado de stablecoins alcanzó una capitalización total de $240.586 mil millones, con un crecimiento del 2,25% semanal. Ethereum continúa liderando con un dominio del 51,80% ($124.6B en stablecoins), seguida por Tron con el 29,65% ($71.3B). Sin embargo, el crecimiento abrupto de BSC representa el salto más significativo desde principios de 2023, y podría marcar un punto de inflexión si se mantiene la tendencia.

El motor de esta expansión ha sido USD1, que se posiciona como una stablecoin respaldada por bonos del Tesoro estadounidense y custodiada por BitGo, lo que la enmarca como un activo de corte institucional. En términos de capitalización, ya se ubica como la séptima stablecoin más grande, superando a propuestas como PayPal USD (PYUSD), First Digital USD (FDUSD) y Ethena USDTB. Este ascenso ha sido respaldado por una narrativa política fuerte, incentivos de adopción temprana y el anuncio de que MGX utilizará USD1 para liquidar una inversión de $2.000 millones en Binance, según declaraciones de Eric Trump.

Desde una perspectiva estratégica, este avance altera el equilibrio entre blockchains de capa 1. Con Solana aún recuperándose del desplome de su ecosistema de memecoins y sin un nuevo catalizador claro, BSC se reposiciona como contendiente directo por el tercer lugar en volumen de stablecoins, especialmente si USD1 logra consolidar su liquidez y obtener una auditoría pública de reservas y contratos.

No obstante, persisten dudas: USD1 aún no está listado en los principales exchanges, la información completa sobre su auditoría no ha sido publicada, y su adopción podría estar inflada por incentivos temporales. Como recordó Kevin Lehtiniitty de Borderless.xyz, lanzar una stablecoin es fácil; lograr adopción real, sostenible y transparente es otro desafío.

La llegada de USD1 añade un matiz geopolítico inédito al mercado de stablecoins, históricamente dominado por productos como USDT (Tether, $149.33B) y USDC (Circle, $61.51B). Si logra establecer un ecosistema institucional robusto y regulado, USD1 podría convertirse en una alternativa política y financiera con implicaciones globales.

Por ahora, su impacto es innegable: ha reposicionado a BSC en el radar, encendido el debate sobre la relación entre poder político y criptoactivos, y añadido una nueva capa de complejidad al juego de poder entre blockchains. Si el impulso se mantiene y la transparencia acompaña, podríamos estar presenciando el inicio de un nuevo eje de influencia en el mundo de las stablecoins.

Publicaciones relacionadas