Twenty One Capital se consolida como la tercera mayor tesorería corporativa en Bitcoin con $685 millones recaudados
• Twenty One Capital alcanza los $685 millones en financiamiento tras una segunda emisión de notas convertibles
• Respaldada por Tether y SoftBank, la firma ya gestiona la tercera mayor tesorería corporativa en Bitcoin a nivel global
$685 millones de capital asegurado, $458 millones en compras recientes de BTC y $3.600 millones más por fusión: la expansión de Twenty One Capital consolida el modelo de empresa pública dedicada exclusivamente a acumular Bitcoin.
El respaldo de gigantes como Tether, SoftBank y Bitfinex marca un nuevo hito en la estrategia institucional hacia la exposición directa al activo.
Twenty One Capital (símbolo: CEP), una firma que redefine la noción de tesorería corporativa, ha elevado su financiamiento total a $685 millones tras una segunda ronda de emisión de notas convertibles por $100 millones, según una reciente actualización en la SEC (formulario 8-K). La empresa, dirigida por el fundador de Strike, Jack Mallers, y respaldada por Tether, SoftBank y Bitfinex, se perfila como el tercer mayor tenedor corporativo de Bitcoin en el mercado público.
La estructura de Twenty One se desarrolla a través de una fusión vía SPAC con Cantor Equity Partners, actualmente listada en el Nasdaq. El enfoque operativo es claro: utilizar su balance para adquirir BTC de manera progresiva, replicando e incluso amplificando el modelo que popularizó Strategy.
Detalle financiero y estratégico
- Financiamiento acumulado: $685 millones
- $385M en notas convertibles
- $200M en acuerdo PIPE
- $100M adicionales en nueva emisión
- Contribuciones al balance:
- Tether: $1.500 millones en BTC
- SoftBank: $900 millones
- Bitfinex: $600 millones
- BTC comprados directamente por Twenty One: $458 millones en mayo
- BTC añadidos vía fusión: $3.600 millones
- Vencimiento de notas convertibles: 2030, con cupón del 1%
El modelo de exposición se basa en una métrica propia de “bitcoin por acción”, buscando ofrecer a los inversores una vía indirecta pero tangible de inversión en Bitcoin, sin los riesgos operativos o fiscales de la autocustodia. Al igual que Strategy, Twenty One apuesta por convertir sus acciones en una especie de ETF sintético con apalancamiento institucional.
Este movimiento refuerza la narrativa de que Bitcoin ha dejado de ser un activo especulativo para convertirse en una herramienta estratégica de preservación de capital y exposición corporativa. Además, Twenty One diversifica su estructura financiera con esquemas flexibles de deuda convertible, lo que le permite optimizar su capacidad de acumulación sin recurrir exclusivamente a equity dilutivo.
En paralelo, la entrada de la familia Trump al terreno de las tesorerías Bitcoin —a través de Trump Media and Technology Group y su propuesta de levantar $2.500 millones para adquirir BTC— sugiere una carrera institucional por posicionarse en esta nueva clase de vehículo público enfocado exclusivamente en Bitcoin.
El caso de Twenty One marca una evolución significativa del patrón iniciado por Michael Saylor en 2020. Hoy, grandes consorcios como Tether y SoftBank apuestan directamente por firmas cuya única misión es comprar y mantener Bitcoin como activo de reserva, integrando este modelo en los mercados tradicionales mediante instrumentos listados en bolsa.
La frontera entre las empresas de tecnología financiera y los fondos de inversión en Bitcoin se diluye cada vez más. En este nuevo paradigma, los inversionistas ya no necesitan elegir entre acciones y cripto: pueden tener ambas en un solo ticker.
