Inflación en mínimos, mercados temblando y la Fed en vilo: ¿Qué futuro espera al dólar y a Bitcoin?

• La inflación PCE cayó a 2,1 % en abril, el menor nivel en ocho meses, mientras los ingresos personales crecieron 0,8 %, superando expectativas.
• Las tensiones comerciales con China y la cautela de la Fed mantienen la incertidumbre en los mercados, que temen un impacto en la confianza del consumidor y en el gasto.

La inflación en Estados Unidos, medida por el Índice de Precios del Gasto de Consumo Personal (PCE), mostró señales de alivio en abril, situándose en 2,1 % interanual, por debajo de las previsiones de los analistas y marcando el menor nivel en ocho meses. Este dato representa un respiro para la política monetaria de la Reserva Federal, que utiliza este índice como referencia clave para sus decisiones sobre tasas de interés. Por otro lado, la inflación básica, que excluye los componentes volátiles de alimentos y energía, avanzó apenas un 0,1 % mensual y se colocó en 2,5 % interanual, en línea con las proyecciones.

El Departamento de Comercio, que difundió los datos el viernes, informó también que el gasto de los consumidores avanzó solo un 0,2 % en abril, muy por debajo del 0,7 % registrado en marzo. En contraste, los ingresos personales crecieron un sólido 0,8 %, casi triplicando la expectativa de un 0,3 %. Este contraste refleja un entorno en el que la capacidad de gasto aumenta, pero los consumidores prefieren la cautela, posiblemente en respuesta a las crecientes tensiones comerciales y a la incertidumbre macroeconómica.

El contexto geopolítico añade un matiz complejo. A inicios de mes, el presidente Donald Trump impuso nuevos aranceles a China y, en declaraciones recientes, afirmó que «China violó» el acuerdo comercial vigente. Según reportes de The Wall Street Journal, su equipo estudia nuevas medidas arancelarias de hasta un 15 % durante 150 días bajo la Ley de Comercio de 1974. Estas tensiones ya se han dejado sentir en los mercados financieros: los futuros del Dow Jones cedieron 174 puntos (0,4 %) el viernes, mientras que los del S&P 500 y Nasdaq-100 retrocedieron 0,6 %. La desconfianza también se reflejó en el dólar, que apenas subió un 0,1 % a 99,44 en el índice DXY, manteniendo la atención sobre los soportes y resistencias del par EUR/USD en 1,1200 y 1,1400-1,1575 respectivamente.

La Reserva Federal, por su parte, sigue mostrando prudencia. John Williams, presidente de la Fed de Nueva York, advirtió que la inflación aún se mantiene por encima del objetivo, mientras que Neel Kashkari, de la Fed de Minneapolis, subrayó la necesidad de entender mejor el impacto de los aranceles antes de ajustar las tasas. Jerome Powell, presidente de la Fed, reiteró en la última conferencia que no hay urgencia para actuar hasta que se clarifique el panorama económico.

Los inversores en Bitcoin y otros activos de riesgo siguen con atención estos datos, ya que la inflación y la política comercial de EE. UU. influyen directamente en la percepción de refugio o cobertura de activos alternativos. Aunque la inflación general se moderó, el entorno de ingresos sólidos y gasto contenido sugiere que el ciclo económico aún no se ha definido. El mercado de Bitcoin, históricamente sensible a cambios en la política monetaria y las expectativas inflacionarias, podría encontrar en estos datos tanto un aliciente como un punto de alerta, especialmente si las tensiones comerciales escalan y generan un clima de incertidumbre más duradero.

El escenario actual, con una inflación en retroceso pero con factores exógenos como los aranceles y la desconfianza geopolítica, exige a los inversores un seguimiento riguroso de los próximos indicadores macroeconómicos. La clave, más allá del número puntual de la inflación, será cómo estos datos moderen las expectativas de la Fed y, por extensión, cómo influyan en la confianza de los consumidores y la dirección de los flujos de inversión en el segundo semestre del año.