Un nuevo giro en la política monetaria

 Un nuevo giro en la política monetaria
  • Flujo de liquidez en los mercados: ¿está cambiando un nuevo ciclo para el Bitcoin?
  • El ausente factor: ¿cómo influye el ajuste cuantitativo del Federal Reserve (y su probable final) en la ruta alcista de Bitcoin?

Desde mediados de 2022, la Reserva Federal ha realizado una estrategia de reducción de su hoja de balance, al dejar vencer y no reemplazar títulos del Tesoro y valores hipotecarios el proceso conocido como ajuste cuantitativo o QT. Este mecanismo retira liquidez del sistema bancario y de los flujos financieros que alimentan activos de riesgo.

En el contexto actual, varios indicadores sugieren que el QT está alcanzando un punto crítico: por ejemplo, las reservas bancarias excedentes están en mínimos recientes, los precios de los repos se endurecen y el uso del mecanismo de repos del día a día se incrementa. Una señal relevante: el presidente de la Fed, Jerome Powell, ha declarado que el proceso podría estar “en su punto de finalización en los próximos meses”.

Para los inversores en Bitcoin, esto plantea un cambio de entorno importante: si la contracción de liquidez se detiene o revierte, los flujos hacia riesgos y activos no tradicionales podrían acelerarse.

¿Por qué importa al Bitcoin?

Liquidez, tasas reales y dólar

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El precio de Bitcoin no opera en aislamiento; depende de un pulso macroeconómico más amplio. Tres variables clave destacan:

  1. Tasas reales: cuando las tasas de interés menos inflación caen, se reduce el “coste de oportunidad” de mantener activos sin rendimiento, como Bitcoin.
  2. Liquidez del sistema: una menor destrucción de reservas (o incluso expansión) facilita que capitales se desplacen hacia activos de riesgo.
  3. Dólar estadounidense: dado que Bitcoin cotiza en dólares, un dólar más débil favorece la apreciación del criptoactivo frente a otras monedas.

El cambio en la lectura de QT influye directamente en dos de esos factores (liquidez y reservas), lo que convierte al panorama financiero en una de las palancas de soporte para Bitcoin.

¿Qué dicen los análisis recientes?

  • Según CryptoSlate, el recorte de 25 puntos básicos por parte de la Fed es menos relevante que la señal de “alto al QT”, pues esto podría liberar reservas y desplazar flujos hacia Bitcoin.
  • En otro análisis de Cointelegraph se afirma que cuando la Fed termina el QT y reinvierte en letras del Tesoro, técnicamente está impulsando liquidez lo que, en su escenario, podría llevar a Bitcoin hacia los 130.000 – 180.000 USD a mediano plazo.
  • Un reportaje de FX Leaders señala que Bitcoin rebotó desde ~107.000 USD tras las señales del fin de QT, y que el soporte en ese nivel está sosteniéndose.

¿Qué diferencias hay respecto al ciclo de 2019?

Algunos analistas hacen el paralelismo con la pausa de QT de 2019, en la cual Bitcoin registró un repunte. Pero hay diferencias:

  • En 2019, la tasa de interés del Fed era mucho más baja (~2,5 %) frente al ~4 % actual. Esto implica que hoy “hay más energía acumulada” para un cambio.
  • La adopción institucional de Bitcoin es mucho mayor en 2025. En 2019 el ecosistema era más minoritario.
  • El entorno regulatorio, la proliferación de ETF de Bitcoin, y la visibilidad institucional han avanzado considerablemente.

Riesgos y matices que no se pueden ignorar

Aunque el escenario para Bitcoin luce favorable, mi experiencia de inversor veterano me obliga a subrayar los riesgos:

  • Timing incierto: que la Fed termine el QT no significa que sea inmediata la expansión de liquidez. Podría haber fase de espera o expectativas decepcionantes, lo cual puede generar correcciones.
  • Expectativas ya descontadas: si el mercado ya ha anticipado el cambio de política, el “rebote” puede estar parcialmente pre-incorporado.
  • Impacto de otras variables macro: inflación persistente, fuertes datos de empleo, tensiones geopolíticas, podrían forzar a la Fed a mantener rigidez. Si eso ocurre, Bitcoin podría no reaccionar como en el “guion” habitual.
  • Altcoins vs Bitcoin: un entorno de liquidez creciente puede beneficiar no sólo a Bitcoin sino también a altcoins más especulativas, lo cual generaría redistribuciones de capital que podrían restar protagonismo temporal a Bitcoin. Yo, como analista, priorizo Bitcoin por robustez, pero no desconozco este dinamismo.
  • Aspecto técnico-cíclico: Bitcoin ha completado recientemente un ciclo de ~4 años, y aunque muchos esperan un nuevo ciclo alcista, el pasado no garantiza el futuro. El “rebote” podría tardar, ser moderado o venir con alta volatilidad.

Qué debe vigilar el inversor

Para posicionarse con prudencia y aprovechar este posible cambio de ciclo, sugiero mantener el foco en estos indicadores:

  • Reservas del banco central y evolución del balance (para entender efecto en liquidez).
  • Evolución del índice del dólar y las tasas reales de los bonos de EE. UU.
  • Flujos netos hacia ETFs de Bitcoin / entradas institucionales (puesto que un aumento puede ser señal de acumulación real).
  • Soportes de precio en Bitcoin: en torno a ~100.000-110.000 USD podrían funcionar como zona de acumulación estratégica.
  • Sentimiento de mercado y expectativas hacia la Fed: si el mercado asume que QT ya cambió la mano, el “margen de sorpresa” se reduce.

La lectura final es que estamos ante un punto de inflexión que podría marcar el inicio de una nueva fase para Bitcoin. Pero como ocurre siempre en este ecosistema, no se trata de “compra segura”: más bien, es una excelente oportunidad para estudiar, posicionar y vigilar con disciplina. La liquidez está cambiando de contorno, y quienes entiendan que Bitcoin actúa como receptor neto de estos flujos, pueden situarse con ventaja.