Bitcoin y su resistencia: señales mixtas en el mercado

 Bitcoin y su resistencia: señales mixtas en el mercado
  • Bitcoin alcanzó los $116,358 en su mayor repunte de 19 días.
  • ¿El alza está sostenida por fundamentos sólidos o es una pausa antes de mayor volatilidad?

El mercado de Bitcoin entró en una semana cargada de expectativas. El repunte hasta los $116,358 coincidió con datos de inflación en EE. UU. más moderados y con la creciente probabilidad de que la Reserva Federal recorte las tasas de interés en su próxima reunión. Sin embargo, la euforia convive con dudas: ¿estamos frente al inicio de un ciclo alcista prolongado o simplemente ante un respiro temporal en medio de la incertidumbre global?

Impulso macroeconómico y apetito por riesgo

Los movimientos recientes de Bitcoin se explican en gran medida por factores externos al ecosistema. El índice de precios al productor en EE. UU. cayó 0,1% en agosto de 2025, la primera contracción desde abril, lo que elevó las expectativas de un ajuste monetario menos restrictivo. Según la herramienta FedWatch de CME, existe una probabilidad del 92,7% de que la Fed reduzca en 25 puntos básicos las tasas de interés, y un 7,3% de que la baja sea de medio punto.

La lógica del mercado es clara: un entorno de menor costo del dinero puede revitalizar el apetito por activos de riesgo, y Bitcoin, aunque catalogado como activo alternativo, sigue siendo percibido como una cobertura frente a políticas expansivas y a la erosión del valor del dólar.

No obstante, este vínculo con la política monetaria también lo hace vulnerable. El mismo estímulo que hoy impulsa su precio podría revertirse con fuerza si los datos de inflación vuelven a presionar o si la Fed sorprende con un tono más agresivo.

Suscríbete y recibe las mejores actualizaciones e informes en tu bandeja de entrada

Fuerza de la red: tasa de hash y dificultad en récord

El componente interno de Bitcoin también envía señales relevantes. La tasa de hash alcanzó 1,12 mil millones de TH/s el 12 de septiembre, y la dificultad de minado se ajustó a un máximo histórico de 136,04T. Estos datos reflejan un nivel sin precedentes de seguridad y poder de cómputo en la red.

El próximo ajuste previsto elevaría la dificultad hasta 144,72T, lo que implica un entorno más desafiante para los mineros pequeños y un proceso de consolidación a favor de operadores institucionales. Según expertos, estas fases históricamente preceden a movimientos de precio más pronunciados.

Además, las reservas de los mineros aumentaron a 1,808 millones de BTC, máximo de 50 días, lo que sugiere una menor disposición a liquidar y, en consecuencia, menos presión vendedora inmediata.

ETF y sentimiento inversor

Otro motor que ha sostenido la confianza son las entradas netas en los ETF de Bitcoin al contado en EE. UU., que han encadenado varias semanas consecutivas de flujos positivos. Esto ha reforzado la narrativa de institucionalización del activo, un factor que, de acuerdo con firmas como Galaxy Digital, puede abrir la puerta a nuevos máximos hacia fin de año.

Sin embargo, el panorama no es homogéneo. Mientras Bitcoin logra mantener el impulso, las principales altcoins muestran avances más discretos: Ethereum, XRP y Solana apenas registraron ganancias de un solo dígito. El contraste lo marcaron Dogecoin e Hyperliquid, con subidas de 25% y 23%, respectivamente, reflejando la volatilidad y el sesgo especulativo que persiste en segmentos del mercado.

Bitcoin mantiene su narrativa de activo resiliente, capaz de reaccionar a condiciones económicas globales y de reforzarse gracias a la solidez de su infraestructura. El alza reciente hasta los $116,000 muestra un mercado que vuelve a apostar por su potencial, pero los riesgos de sobreconfianza son latentes.

La pregunta de fondo no es si Bitcoin puede subir más en el corto plazo, sino si su actual combinación de factores —tasas más bajas, mayor poder de cómputo y entradas institucionales— será suficiente para sostener un ciclo alcista en medio de una economía mundial plagada de incertidumbres.